Japangelica
Volví a Japón, pero esta vez, no fue para ser una turista; fue para reencontrarme con una amistad que se ha convertido en una extensión de mi, en propia familia. La conozco desde 2015, cuando ambas éramos extranjeras en una tierra lejana. Desde aquel primer encuentro en una casa compartida producto de una confusión por su color de cabello, hasta nuestras pláticas más profundas, hemos compartido más que risas y lágrimas; compartimos una conexión inexplicable.
Al llegar, me sumergí en la rutina diaria de su vida, algo que muchos podrían ver como mundano, pero para mí, fue revelador. Desde ir a comprar la canasta básica hasta los pequeños detalles de cómo organiza la ropa de su hijo, cada actividad cotidiana se convirtió en una oportunidad para acercarme más a ella y a su mundo. Lo cotidiano se convirtió en extraordinario.
Pero hay momentos que quedan grabados en la memoria, y uno de ellos ocurrió en un parque rodeado de naturaleza. Nos encontrábamos ella y yo, hablando sobre el amor incondicional, y fue entonces que pensé familia no se elige; simplemente aparece. Ella me ha enseñado que el amor no es algo que se pide, sino que se recibe, como un regalo inesperado.
Es esa forma de amor lo que me ha mostrado que merezco algo mejor, algo más profundo. Ella siempre ha estado allí, apoyándome en cada fase de mi vida, y me ha hecho entender que la familia es un lazo del alma. Me siento increíblemente afortunada de haber encontrado a alguien que me quiere tal como soy, a pesar de mis fallos y mis complejidades. Y aunque no siempre iniciamos conversaciones de la misma manera, ella nunca me ha hecho sentir culpable por ello. Incluso hace esfuerzos por entender y compartir mis intereses, aunque no sean los suyos.
Esto no es solo un viaje, es un retorno a un hogar que nunca supe que tenía. Es una reflexión sobre el amor, la amistad y el sentido de pertenencia que va más allá de las fronteras y las culturas. Es una historia de dos almas encontradas en un universo inmenso, dos almas que han decidido convertirse en familia y lo seguirán siendo.