No perfecto
Tomo decisiones. Salvaje avanzo Desenfrenada
Estoy en una etapa muy linda. Efectivamente, soy como un bebé dando sus primeros pasos. Tipi tipi atrevido, pies bailando del otro lado de la cortina. Sin saber controlar del todo, mi total atención enfocada en el deleite de mi propio avance ignorando todo el desastre de efecto secundario.
Y sin embargo, soy feliz de dar mis primeros pasos. ¡Puedo avanzar! No es perfecto Es progreso.
He hecho algunas cosas. Tengo todo este gran afecto y amor que me había estado guardando por puro miedo.
El otro día tuve una conversación con Lica, donde le confesé mis sentimientos, tan similares a los suyos, y entendí una cosa. Entendí porque tengo esta frase repitiéndose en bucle en la parte de atrás de mi cabeza.
Ella es fan de hacer video llamadas, yo por otra parte, cuando la conocí, era algo que me aterraba. Me inundaba la ansiedad y la angustia cada que quería hablar, y siempre lo aplazaba, lo aplazaba. Parte de esa ansiedad era que inevitablemente sabría que me preguntaría por mi y yo misma estaba menos que orgullosa de mi propia situación. Sentía que nada de lo que había logrado era realmente algo que me representara. Cada que hablabamos tenía que hacer una nueva excusa para poder justificarle por qué no estaba haciendo todas aquellas cosas que le enseñé cuando me atreví a soñar en voz alta con ella.
Y entendí, en esta conversación del otro día, que no se trata del miedo o la ansiedad que yo siento ante estas llamadas, se trata del amor que le puedo dar y el que ella recibirá si me decido a cruzar ese umbral ominoso.
Luz.
Sentí que había luz en una habitación oscura de mi propia mente.
¡Claro! Yo estoy aquí, quiero llegar allá, y la manera de llegar allá es con un puente. ¿Y de qué está hecho ese puente? ¡De amor!
Tal vez falle, tal vez mis próximas construcciones sean efímeras, pero ahora siento que tengo este super poder de ignorar mis temores y hacer puentes de colores.